Un último acorde al aire, tres palabras sobre el papel, un suspiro tan eterno como el sol, un recuerdo tan grande como el mar… Demonios que perturban la calma, como la lluvia cega el azul cielo, inevitables pero no invensibles, ausentes en el momento aquel que el viento ahogue su aliento, será inolvidable, serán… 

Y entre canciones rimará el recuerdo, sollozante y oculto en el fondo del corazón hasta que un nuevo latido desplace el recuerdo hacia otro lugar de la memoria, hasta que la primavera florezca una vez más allí en aquel lugar, hasta que el rencor se apague, la soberbia se esfume… 

Todo será, de nuevo como ha de ser… 

Logré escaparme de lo cotidiano
Huir lejos de la rutina
Corriendo sin mirar al pasado
Todo por alcanzarte

Salí a buscarte
Entre lo indivisible, lo inerte e invisible
Temeroso ante el desprecio
Ante todo persistente
Sin flaquear entre lo absurdo e ilógico

La luna, la noche y un deseo
Dos, un sólo cómplice
Nada más importa
El sonido de tu alma amenizando la noche
Como lo hicieron tus labios
Alguna vez..
Ves que todo, mucho o nada es distinto
Sorprendente presente
Desvelate futuro

Sé que solo tus ojos
Única respuesta a lo incierto
No hay duda alguna
Todo cambia
Nada muere
Todo late
Todo vibra
Todo siente
Todo…

 

 

Una melodía naturalmente perfecta engalana la mañana
Sonidos de libertad se refugian entre las ramas verdes, otras secas
Allí firmes, sin importar la lluvia, la niebla, ni el frío
Sin pretextos ante el infernal sol
Sus raíces firmes, sin doblegarse ante el miedo
El mismo que acecha incansablemente
Como la bruma, como la misma oscuridad

Decir lo cierto, pues nunca será imposible
Desear lo alcanzable, pues nunca estará tan lejos
Así son los sueños, razón de vivir
Oxígeno del alma, alimento para el corazón
Pues nada llena más de euforia, emoción y alegría al corazón
Que un sueño realidad
Cuando camina de la mano contigo
Como al despertar lo sientes tan tuyo
Tan fuerte, tan vivo…

Ayer no fue más que un pensamiento
Vago, débil, inmenso, tímido
Inexplicable, sin dejar de ser
Verlo pasar como si nada
Tan ansioso, sediento
Y pensar que lo simple aquí no tuvo espacio
Solo hasta el final

Has llegado hasta aquí no por poco
Cada día por mucho más
Sediento de más
Soñar, pues eso es vivir
Son la razón
Oxígeno del alma, alimento para el corazón.